¡Desde ahora hasta fin de año, puedes ayudarnos a brindar atención veterinaria a bajo costo y recursos vitales a los amiguitos peludos de nuestra comunidad que más lo necesitan!
Mía acababa de comenzar su vida con una familia amorosa cuando ocurrió la tragedia. Ella se enfermó gravemente, y era incapaz de mantener comida ni agua en su estómago. Su familia, desesperada y financieramente agotada por las visitas veterinarias anteriores, se enfrentó a una decisión desgarradora: entregar a Mia a un refugio sobrepoblado a capacidad para que pudiera recibir la ayuda que necesitaba o sacrificarla con euthanasia inducida, ya que no podían costear la cirugía que le salvaría la vida.
Fue entonces cuando recurrieron al Pet Resource Center—que era la última esperanza de Mia. La Dra. Nichols descubrió un fragmento de un juguete de goma alojado en sus intestinos, que era la causa de una obstrucción que ponía en peligro su vida. Nuestro equipo se propuso a realizar la cirugía que salvó la vida de Mia.
Familias como la de Mia recurren a nosotros con frecuencia, abrumadas por los costos veterinarios, tratando de evitar perder a sus queridos compañeros peludos. Tu donación nos permite decir “Sí, yo te ayudo” a estas familias, salvando vidas y evitando separaciones desgarradoras.
El final feliz de Mia fue posible gracias a personas como tú. Por favor, ayúdanos a continuar con este trabajo vital. Cada dólar que dones se DUPLICA y realmente hace la diferencia.
Con gratitud les damos las gracias a personas como tu,
Kristin Roth
CEO